Seguramente alguna vez habrán oido hablar de la quinoa y sus virtudes. Obviamente lo de alguna vez va dirigido a los que como yo tienen una dieta más carnívora y alejada de la alimentación naturista.
Esta prodigiosa semillita se cultiva desde hace más de 5000 años.
Era benerada por la cultura inca, la llamaban "grano madre" y su siembra era un importante ritual llevado a cabo por el cacique mayor.
Tiene un extraordinario contenido de proteínas de alto valor biológico, aminoácidos esenciales, minerales, fibras y vitamina E. No contiene gluten, por eso es de tan facil digestión y apta para celíacos.
Es uno de los alimentos más completos y balanceados, algunos científicos aseguran que su valor nutricional es sólo comparable con la leche materna.
Entonces si es tan genial vamos a incluirla en nuestra dieta!!!
Ingredientes:
1 taza de quinoa
2 tazas de agua
cebolla de verdeo picada
zucchinis
mascarpone
pesto
aceite de oliva
sal pimienta
La cocción de la quinoa es similar a la del arroz, se calcula una medida de quinoa por dos de agua.
Algo que hay que tener muy en cuenta es lavarla varias veces, hasta que el agua salga transparente, y luego dejarla escurrir bien.
Colocar en una sartén un poco de aceite de oliva y saltear la cebolla de verdeo que debe estar cortada bien chiquita y los zucchinis en cubitos.
Cuando los vegetales estén doraditos y algo tiernos agregar la quinoa y saltear un minuto.
En otra cacerola tener a temperatura el agua con un poco de sal y agunas hierbas para aromatizar.
Agregar sobre la quinoa un cucharón de agua y revolver hasta que absorba, repetir esta operación hasta terminar con las dos tazas de agua.
El tiempo de cocción de la quinoa es de 15 a 20 minutos.
Pasado este tiempo probar el grano, si está tierno retirar del fuego.
Servir en el plato con una cucharada de mascarpone o queso crema y un poco de pesto por encima.
Comida rica y saludable.
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