Esta receta está inspirada en los espectaculares rollos de canela que comí en Cinnabon, una muy conocida cadena de confiterías que descubrí en Miami.
Si bien en Cinnabon podemos encontrar varios productos de repostería y bebidas el secreto de su fama está en sus rollos de canela que son realmente espectaculares.
Lo más llamativo del lugar es el penetrante aroma a canela que sale de sus hornos y las filas de gente que se forman en sus mostradores esperando para llevarse sus rollos recién horneados.
Recordando esas delicias surgió ésta receta que une los más ricos aromas y uns masa muy fácil de hacer.
Ingredientes:
500 gr de harina 0000
30 gr de levadura
2 huevos
100 gr de manteca
100 gr de azúcar
leche cantidad necesaria
2 cucharadas soperas de canela
1 cucharadita de polvo de 5 especias chinas
2 cucharadas soperas de azúcar rubia
extracto de vainilla
2 cucharadas de miel
La técnica para hacer ésta torta es la misma que para las roscas, panes y todas las masas con levadura.
Primero hay que espumar la levadura, la colocamos en un cuenquito con una cucharada de azúcar y un poquito de leche tibia. Por arriba le espolvoreamos una cucharada de harina y la dejamos unos minutos hasta que burbujee.
Mientras tanto unir manteca, harina, azúcar y hacer un arenado.
Para formar el bollo, hacemos un huequito en el centro y colocamos los huevos ligeramente batidos para romper la liga, la levadura ya espumada, un chorrito de extracto de vainilla y un poco de leche (esto es a ojo).
Amasar muy bien hasta obtener una masa lisa que no se pegue en la mesada.
Dejar descansar una hora.
Luego estirar en forma rectangular y esparcir por toda la superficie las especias y el azúcar rubio.
Enrollar como si fuera un pionono y cortar en porciones parejas de no más de 5 cm de largo.
Como precaución forrar el fordo del molde elegido con papel manteca y enmantecar bien los costados.
Colocar los rollitos dentro del molde intentando cubrirlo. No hay problema si quedan varios espacios vacios, ya que la masa va a levar durante la cocción y sola se acomoda en el molde.
Cocinar en un horno a temperatura media por 30 minutos.
Pasado ese tiempo retirar la torta del horno y bañar toda la superficie con miel. Luego volver al horno por 5 minutos más y estará lista.
Acompañarla con un espumoso capuchino.
