Para todos aquellos que, como yo, disfrutan de leer buenos libros de gastronomía, hoy les voy a recomendar una de mis últimas adquisiciones.
Around my french table, de Dorie Greenspan. Es un compendio de 300 recetas de la exquisita cocina francesa, abarca de los más tradicionales a los más refinados platos que podamos conocer.
Su autora es una chef norteamericana que desde hace varios años vive en Paris.
Ella a través de sus libros y su blog llegó a convertirse una referente de la gastronomía de ese lugar.
De todas sus maravillosas recetas voy a compartir con ustedes quizás la más tradicional de la panadería francesa, la brioche...
Son panes con una masa muy sabrosa que se hacen con huevos y manteca.
Ideales para comerlos tibios en el desayuno con una rica mermelada de frutas.
Ingredientes:
700 gr de harina 0000
65 gr de levadura fresca
3 huevos
120 gr de manteca
6 cucharadas de azúcar
100 ml de agua tibia
100 ml de leche tibia
pizca de sal
extracto de vainilla (opcional)
Primero debemos esponjar la levadura, la colocamos en un bowl con el azúcar y los líquidos, agua y leche que tienen que estar tibios.
Disolver bien la levadura y dejarla espumar.
En otro bowl bien grande colocar la harina junto con la sal, y una vez que la levadura esté lista agregarla y comenzar a mezclar.
Si les gusta pueden perfumar la masa con vainilla.
Esta receta lleva mucho amasado, que se puede hacer a máquina o a mano.
Comenzar a amasar y agregar de a uno los huevos hasta que se integran por completo y formen un bollo liso.
Ahora es momento de incorporar la manteca que la debemos tener blandita y cortada en cubos pequeños.
Sin dejar de amasar integrar de a uno los cubitos de manteca. Este paso requiere de paciencia.
Necesitamos que la masa incorpore por completo un pedacito de manteca antes de agregar el otro.
De esta forma vamos a obtener una masa muy elástica y lisa.
Una vez lista, la tapamos con un film plástico y la dejamos leudar por una hora. Tiene que duplicar el volúmen.
La masa de brioche se pude cocinar en forma de trenza, pan redondo, ó los tradicionales bollitos.
A mi parece simpática la propuesta de éste libro y hacerlos en forma de tortitas usando moldes de muffins.
Tenemos que separar en la masa en pequeñas porciones y bollarlas lo más parejo posible.
Las colocamos de a tres en los moldes, las dejamos levar un ratito y luego al horno.
Previamente las pintamos con una mezcla de huevo y leche.
Se cocinan por 15 minutos en horno medio hasta que se doren por arriba.
