Fácil, sabrosa y con apariencia rústica. Esta es una receta con inspiración italiana.
Se trata de buscarle otro plan a la polenta, alejarla de las preparaciones clásicas.
Con harina de maíz podemos hacer infinidad de platos. Además en recetas de pastelería podemos lograr unas muy buenas masas con diferentes texturas.
Hoy va a ser la base crocante de una pizza de hongos.
Ingredientes:
1 taza de polenta
500 ml de agua
hongos shitake
hongos portobello
manteca
aceite de oliva
queso rallado
echalotte
tomillo - salvia - perejil - orégano - ciboulette
sal - pimienta negra
Cocinar la polenta: colocar al fuego una cacerola con el agua, condimentar con sal y esperar que alcance temperatura. Agregar la polenta y revolver contantemente para que no se formen grumos.
Cocinar por 3 minutos hasta que tenga una consistencia firme.
Una vez fuera del fuego agregar un poquito de hierbas picadas.
Colocar la polenta en una placa aceitada y estirarla del grosor deseado. Reservar.
Cortar los hongos gorditos y desparejos.
En una sartén calentar aceite de oliva y saltear el echalotte y las hierbas frescas picadas, menos el perejil que se pone a último momento.
Agregar los hongos y cocinar hasta que se doren.
Por último agregar sal, pimienta y el perejil.
Colocar sobre la polenta y por encima agregar queso rallado y un poco más de pimienta.
Llevar al horno hasta que dore.
