- 600 gr. de pollo cortado en cubos
- 2 cucharadas de almidón de maíz
- 2 cucharadas de vino de cocina chino ó mirín
- 3 cucharadas de aceite de sésamo
- jengibre cortado en tiras
- 1 cucharada de azúcar negra
- 2 cucharadas de salsa de soja suave
- 1 cucharada de vinagre de arroz
- 1/2 taza de maní picado
- cilantro
- pizca de pimienta de Sichuán
Mezclar el vino, el almidón de maíz y el jengibre con el pollo cortado, dejarlo marinar por una hora en la heladera.
Calentar un wok, colocar el aceite de sésamo y saltear el pollo junto al jengibre por 5 minutos, luego agregar el azúcar, el vinagre y la salsa de soja; cocinar por 10 minutos más.
Por último agregar el maní y la pimienta de Sichuán.
Servirlo en cuencos sobre un colchón de arroz blanco y decorar con hojitas de cilantro picadas.